domingo, 2 de febrero de 2014

"Si queréis salvar la música clásica..."

No tenía intención de venir hoy por aquí, pero este artículo que he leído me ha provocado ganas de escribir algo:
http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2013/01/25/ldquoquereis-salvar-a-la-musica-clasica-bailad-mas-y-vestios-de-otra-manerardquo-113519/

Volver a feisbuc tiene sus riesgos y entre ellos está encontrarse cosas como ésta.
"Si queréis salvar la música clásica..." (léase con voz de niño chico haciendo burla) ¿Cuántas veces no habré visto esta frase o similares por aquí? eso cuando no dicen ya directamente que está muerta y enterrada ¿Salvarla de qué? ¿De gente que la entiende como una forma de enriquecerse? ¿Y a nosotros quién nos salva de esa mentalidad de mercachifles que no ve más allá del dinero, que les hace pensar que aquello que no les genera riqueza no sirve para nada? Esa mentalidad si que es dañina, porque es la misma que niega la importancia de los estudios humanísticos en general, porque "no generan riqueza" y por esa razón "no valen para nada". Si por ellos fuera, no seríamos más que esclavos compradores de su mierda. Eso si, con la ilusión de libertad que da poder elegir entre un zurullo verde o una boñiga marrón.

Yo sinceramente creo que mientras haya gente interesada en ir a conciertos y escuchar música (me da igual que sea en un teatro o en youtube) a la música "clásica" no hay que salvarla de nada. El único "problema" aquí es que escuchar música requiere un esfuerzo y toma parte de tu tiempo, y no todo el mundo está dispuesto ni tiene porqué estar dispuesto a hacerlo. Y más cuando una educación deficiente no te induce a tener ese interés.

Se leen también muchas críticas a la institución decimonónica del concierto, como algo ya pasado y muerto, comparándola con conciertos de otros géneros musicales en los que la gente aplaude cuando quiere, baila, etc... ¿pues qué queréis que os diga? Llamadme decimonónico, pero a mí me gustan los conciertos, y si alguien no es capaz de estar sentado una hora escuchando música sin hacer ruidos corporales, abrir caramelos, levantarse, hablar con el de al lado, etc. que no vaya. Para mí el silencio es el marco más adecuado para presentar una obra musical (por no decir que quizás sea el único adecuado).

Y acabo con una entrevista a Luis de Pablo que encontré hace poco, bastante más interesante que la opinión del Directivo de Universal Music, y en la que también se toca un poco este inevitable asunto de la supuesta "muerte de la música clásica/ contemporánea". Es larga pero merece la pena leerla entera:
http://amcc.es/entrevistas/luis-de-pablo/

Me despido con una pregunta y la respuesta que da el compositor:
"JT: La música, en realidad, no le interesa a mucha gente. 
LP: Pues claro que no, y eso no quiere decir nada. Le interesan todavía muchísimo menos las últimas investigaciones de la física, no saben de qué van, y yo tampoco, vaya eso por delante.(...) Así que hablar de mayorías o minorías, o de qué atrae a la gente, eso es lisa y llanamente un criterio. Es como si dijéramos, aquí sólo votan los calvos, el que no sea calvo no vota. Pues yo estaría muy contento de votar, pero tú, pues no, o sea que sería absurdo. Viene mucho público o no viene mucho público, y a mí qué me cuentas."

(Postdata: Casualmente hace poco, mi compañero José Ángel, subía esta otra entrevista a Luis de Pablo, y no puedo menos que enlazarla desde aquí, aunque dice (de manera más amena, ya que él mismo nos lo cuenta en persona) más o menos lo mismo que en la anterior: http://ludusmusicae.blogspot.com.es/2014/01/luis-de-pablo.html)

5 comentarios:

  1. AMÉN HERMANO, ¡¡¡¡LA CULTURA NO MORIRÁ NUNCA!!!!

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  2. Pues yo estoy bastante de acuerdo con las palabras de ese tal Max Hole.

    A mí también me toca bastante las narices la concepción mercantilista de todo y no admitiría eso como la razón para esa "evolución" de la música clásica.

    Ahora bien... Creo que en esa actitud conservadora y poco dispuesta al cambio está la "muerte" de la música académica como la conocemos. Y cuidado, no quiero caer en el tópico que tú has mencionado sobre lo extinta que está la música "clásica", pero hay que ser realistas: las manifestaciones culturales sobreviven porque las gente las vive, las quiere, las desarrolla y las potencia, y cuando dejan de hacerlo se convierten en una pieza más de la Historia. Y si esto ocurriera, evidentemente la música "clásica" no dejaría de existir, seguiría estando en el cajón, en las grabaciones y en esa Historia para poder disfrutarla, pero sí muy probablemente la composición musical contemporánea en esos términos, ante la ausencia de un público que la demande y la realidad de unos compositores (intérpretes o lo que se quiera) que no podrían subsistir gracias a ella.

    Por eso yo pienso que empaquetar esa música "clásica" en características propias de otras manifestaciones musicales es asumir una contradicción evidente en aras a conseguir que, por algún medio, esa música llegue a la gente. Y a partir de ahí se puede ir avanzando e ir "enganchando" a esa gente a manifestaciones más puras o "auténticas". El musical, el cine, el Conciertazo de Fernando Argenta o una solución como la que propone el tipo ese serían buenos elementos para ello.

    Y eso no significaría que dejara de haber conciertos tal y como los conocemos, que tendrían su público (como lo tienen ahora), sino que se ampliarían los horizontes hasta un grupo de gente que, muy probablemente de ninguna otra manera, llegarían a apreciar, entender y, por lo tanto, defender la creación musical "académica" (un cajón de sastre, por otro lado, bastante difícil de definir).

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    1. Muy buenas, siempre es un placer tenerte por aquí.

      Como veo que afortunadamente estamos de acuerdo en que esa visión mercantilista es perjudicial para el arte y la cultura (y osaría decir que todo), voy a dejar eso de lado. Si no fuera así... apaga y vámonos, creo que no me molestaría ni en replicar, porque eso me parece básico.

      Bueno, te voy a contestar con un par de experiencias mías:

      Justo ayer estuve tocando con una orquesta el Requiem de Michael Haydn. Fue en una iglesia, y ésta se llenó. El caso es que mientras tocábamos, un pintor iba proyectando imágenes que pintaba sobre la marcha en el retablo de la iglesia. Éstas estaban relacionadas con el texto del Requiem y aquello a la gente le encantó, de manera que al pintor lo ovacionaron después por su trabajo. Es obvio que este tipo de cosas sirve para atraer público (y también es obvio que eso de relacionar imagen y música de una u otra manera no lo inventamos ayer), y ayudan a escuchar la música a gente que tiene poca costumbre.

      No obstante, yo no olvidaría lo siguiente, y es que algunos asistentes al concierto coincidían que aquello estaba muy bien pero impedía centrarse en la audición de la obra.
      ¿Tú deduces de eso que yo estoy en contra de este tipo de performances? si crees que si, no podrías estar más equivocado. No lo estoy, pero como tú bien sabes, la música y las imágenes pueden llegar a estorbarse.
      En una película la música no puede interferir a las imágenes, tiene que estar como si no estuviera, cuando se nota... algo estamos haciendo mal. Éste es el caso contrario, en el que la importancia que alcanzan las imágenes "estorba" a la música, y eso pasa cuando la música tiene una complejidad tal que hace necesario que le prestemos toda nuestra atención. Es una simple cuestión perceptiva, no podemos atender a tantos estímulos simultáneamente, unos anulan a otros.

      Yo creo que al público entre otras cosas le falta información (no solo formación). La gente que asiste a un concierto agradece que se le explique qué se va a interpretar, el por qué, el a cuento de qué... somos unos cotillas. Voy con la siguiente experiencia, en la que participé de público:

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  3. El otro día, estuve en un concierto de la banda municipal de Sevilla en la parroquia de Rochelambert. Tocaron la 6ª Sinfonía de Tchaikovsky, pero no se limitaron solo a eso. Previamente el director se volvió al público, habló algo sobre su autor, y explicó el programa oculto en esta sinfonía (aunque supongo que lo conoces, que realmente Tchaikovsky no murió por una enfermedad sino que se suicidó para evitar un juicio por homosexualidad)
    Podría no haber dicho nada y limitarse a dirigir la obra, pero la gente la hubiera escuchado sin más. Y eso en estos niveles de gente de a pié, no sirve para nada, la gente está deseosa de aprender, a la gente le gusta saber cosas, quiere que le relacionen estas cosas con su realidad para que sean significativas para ellos, eso es lo que yo vi allí. Además de el público más agradecido que he visto en ningún sitio, da gusto ir allí a escuchar conciertos.
    ¿Qué consiguió este hombre con su pequeña charla? por una parte concienció a los asistentes del problema de la intolerancia hacia los que son considerados diferentes por el resto de la sociedad, y por otra, estoy seguro que todos los que se fueron de allí y prestaron un poco de atención no se olvidarán de la música que escucharon, aunque sólo sea por la anécdota y no por la música en sí (doy fe de que hasta hubo quien tuvo que salir en medio de algún movimiento. A mí el primero de ellos me parece especialmente doloroso, independiéntemente de toda esta historia que lo envuelve)

    Creo que estos dos ejemplos que he puesto están en el buen camino para ampliar horizontes y llegar a ese grupo de gente que dices que de otra manera no llegaría a apreciar o entender la música, no ya la creación musical "académica" (y también englobar la danza, el teatro, cosas similares al Conciertazo de Fernando Argenta...).
    Pero para mí lo que ni entra, ni entrará nunca ahí, es la puerilización de la música para ganar más billetes y aborregar más al personal, que es lo que simple y llanamente promulga ese señor Agujero Máximo (perdón por este chistaco digno de Jiménez Losantos, pero no lo he podido evitar)

    Respecto al uso de la música de cine para limitarse a escucharla, creo que ya sabes mi opinión, y si no, la puedes deducir de lo que digo arriba. Es música hecha para acompañar imágenes, crear ambientes, darnos información que no se ve, etc. Muchos casos en los que separamos esa música de las imágenes, a mí me da la sensación de que ésta se queda como un cascarón vacio, en el que falta algo. En resumen, para mí no hay peor "elogio", que que me digan que alguna cosa que haya compuesto "suena a banda sonora".

    Y no me iré sin antes preguntarte: ¿qué es la música "académica"? Sea lo que sea, te encanta ponerla en contra de la música ¿"popular"?¿comercial? ¿Cómo quieres que llamemos al ente antagonista de la música "académica"? ¿Y qué es más académico, un compositor que hace una música que solo la entienden él y 4 más, o un grupito de pop que usa 4 acordes en mi menor, y ¡ay! si se sale de ellos? El caso es que parece que para ti, sinónimo de música académica es música aburrida que no la escucha nadie y a nadie interesa ¿me equivoco? Pues para mí es casi al contrario, porque ese compositor al que no escuchan más que 4 quizás es más libre que ese grupito de pop, limitado por sus conocimientos, sus gustos y las modas del momento.

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