Existen varias versiones de esta obra (evidentemente no hablo de arreglos, que los hay a patadas, sino de versiones del autor). La primera de ellas para flauta, oboe, trompeta, trompa, piano, violonchelo y contrabajo. Pero la más conocida es la versión orquestal que será la que escuchemos (en este caso con un arreglo de la parte vocal, que es interpretada por solos instrumentales). Antes de escucharla me gustaría llamar la atención sobre la importancia del piano en la instrumentación de esta obra, sin que se pueda decir que es solista está prácticamente sonando todo el rato, sin duda es una reminiscencia de la versión anterior para orquesta de cámara:
La interpretación de arriba, dirigida por Rafael Frühbeck de Burgos es para mi gusto de las mejores que hay en youtube, pero tiene el "fallito" de carecer de las partes vocales, así que voy a poner una en la que escuchemos también la voz, como debe ser:
Pocas cantantes he escuchado que me gusten cantando esta obra (incluso hispanoparlantes, de aquellas cuya lengua materna no es el español mejor no digo nada... pero supongo que lo mismo pasará en todos los idiomas) Quizás por la "fusión" que hace Falla en esta obra, cuesta algo de trabajo pillarle el punto a la parte vocal... a mí me gusta que no suene a "bel canto", pero claro, sin pasarse. Esta interpretación de Teresa Berganza que he puesto me gusta, aunque a veces tengo la sensación de que le falta un poco de sangre.
Tampoco me desagrada la interpretación de Rocío Jurado: https://youtu.be/RXsPlg6c71U, pero no he encontrado una grabación completa.
Por último, dejaré por aquí el libreto de la obra, de María de la O Lejárraga, aunque durante mucho tiempo ha sido atribuido a su marido, Gregorio Martínez Sierra: http://es.wikisource.org/wiki/El_amor_brujo_%28libreto%29
Antes de irme voy a dejar por aquí varias curiosidades, la 3ª de las Novelettes de Francis Poulenc, está basada en uno de los temas de El amor brujo: https://youtu.be/JuGpuhGuRlc?t=4m54s
La verdad es que debían llevarse bastante bien, porque Poulenc también le dedicó a Manuel de Falla su Trío para oboe, fagot y piano (me encantan estas cosas de dedicatorias y eso ¿se nota? en cierto modo nos acercan a estas personas y su mundo):
Ensimismamiento: Recogimiento en la intimidad de uno mismo, desentendido del mundo exterior, por contraste con alteración.
Eso nos dice la Real Academia acerca de esta palabra, y esa era más o menos mi idea al escribir esta pieza.
Originariamente la escribí para órgano solo, de hecho pensando en un órgano en particular, el de la iglesia de Alcalá del Río (que es el que suena). Con el tiempo caí en la cuenta de que un instrumento monódico tocando la melodía y el órgano de fondo no resultaría mal. No sólo no resulta mal, sino que facilita bastante la parte de órgano (los acordes de 9 o 10 notas no son lo que se dice cómodos) y además me ha permitido enriquecerla un poco.
En la grabación, quien toca el clarinete soy yo mismo, y el órgano lo toca Mª Soledad Ramírez (amiga y profesora de piano, a la que saludo desde aquí y aprovecho para agradecerle su desinteresada colaboración) Este órgano en particular es un instrumento barroco de un solo teclado, de teclado partido y con 8ª corta. Para esta pieza la registración única que se emplea es "flautado de 13ª", exceptuando en la coda. Respecto a la afinación del instrumento, usa algún tipo de temperamento antiguo que desconozco, pero el caso es que le da a la pieza una sonoridad muy distinta de la que tendría si la hubiéramos tocado en un instrumento en temperamento igual, para mi gusto la mejora, y mucho.
Algunas observaciones más en cuanto a esta pieza:
En su origen está relacionada con la Toccata para piano que escribí hace ya unos 10 años (http://apiaceresevilla.blogspot.com.es/2011/07/toccata-para-piano-2005-2006.html), pues parte de una sucesión de acordes presente en ella (la que comienza su segundo tema, podéis ver la partitura en la entrada que cito arriba). En Ensimismamiento toma esta forma:
(El clarinete, para no complicar mucho el ejemplo, está escrito tal como suena. Por otra parte la grabación suena medio tono baja porque el órgano está afinado a 415. Por consiguiente tuve que tocar la parte de clarinete medio tono más baja de cómo estaba escrita)
La forma de la pieza es binaria, consistente en dos periodos que ascienden a un punto culminante. Ambos periodos comienzan con la exposición del tema inicial que vemos en la imagen. El proceso para llegar al segundo punto culminante está ampliado con respecto a la primera vez. La tesitura limitada del órgano me provocó algún problema en cuanto a esto, ya que al alcanzar la nota más aguda del instrumento en el primero en el segundo no podía subir más. Resolví ese problema (ahora mismo creo que bien) haciendo una mutación para transportar el inicio de la progresión ascendente hacia debajo y poder utilizar de nuevo como punto culminante el mismo acorde del primer periodo, pero en una posición más cerrada y aguda.
Por otra parte, el proceso para llegar al punto culminante se lleva a cabo de la misma manera en ambas ocasiones, se acelera el ritmo armónico hasta que los acordes van cambiando nota a nota: hay una evolución desde la melodía acompañada inicialmente por una armonía estática, a bloques acordales cada vez más densos y que se mueven homorrítmicamente con la melodía. Este tipo de órgano es un instrumento que no puede realizar dinámicas (ni f ni p) pero si podemos jugar con la densidad de los acordes y la tesitura en que se presentan, de tal manera que podemos decir que cuantas más notas tiene un acorde más fuerte suena. Y aquí lo he podido comprobar yo.
La obra acaba con una coda que reexpone el tema inicial en la que la mano izquierda del órgano, tras unos 10 segundos de silencio cuya función es simplemente romper el "ensimismamiento".
Como curiosidad, aquí va un ejemplo de acorde que suena especialmente "tirante" a causa del temperamento desigual del órgano:
Grabación: 1'23" a 1'26". El segundo acorde se repite a lo largo de la frase que sigue
Me refiero al segundo de ellos: El acorde está escrito como Solb mayor, con 6ª añadida, y en primera inversión, el clarinete le añade una 7ª mayor. Lo precede uno de Mib mayor exactamente igual (lo que es una relación mediántica de toda la vida). Si este acorde de "Solb" lo escuchamos en temperamento igual no es más que un transporte de los acordes del compás anterior... pero en este temperamento adquiere una tirantez de la que carecen los acordes anteriores y que lo hace distinto de ellos. Por si no se ha notado, la verdad es que me encanta.
Y esto es todo por ahora, espero que os deje tan ensimismados como a mí.
(Por cierto, la foto es de un paseo por Doñana)
Como todos los años cuando se acerca la Semana Santa, empezamos ya con los certámenes y conciertos de marchas de procesión. Este vídeo es, como el propio título indica, del Certamen de Bandas "Villa de Gines" 2015, que se celebró este domingo pasado, 8 de marzo.
La verdad es que éste de las marchas procesionales no es un género que me guste excesivamente, y mi conocimiento de él se ciñe únicamente a las marchas que toco en la banda. No es la música que suelo escuchar por gusto, pero aún así hay algunas marchas muy buenas, como por ejemplo Soleá dame la mano, que podréis escuchar a continuación en el vídeo (es la 3ª que tocamos, comienza justo en el minuto 32 del vídeo). No descarto dedicarle un día una entrada.
Participan otras dos bandas más además de la Sociedad Filarmónica de Pilas, son la Banda de Cornetas y Tambores "Nuestro Padre Jesús de los Remedios" de Castilleja de la Cuesta y la Banda Municipal de Gines. Precisamente ahora mismo he estado ojeando el blog de esta última banda: http://bandamusicagines.blogspot.com.es/
Nosotros somos los segundos en tocar.
Esta semana pasada estuve en Madrid un par de días para ver una representación de La flauta mágica, de W. A. Mozart. No es la primera vez que veo esta ópera, lo que realmente hacía importante y especial esta ocasión era ver a mi amiga Marián Pérez en el papel de Reina de la Noche. Os paso un enlace de su blog con la grabación de la segunda aria que canta en la ópera, Der HölleRache: http://angelesperezgarcia.blogspot.com.es/p/companeros.html
He de decir, porque lo sé de buena tinta, que la grabación está hecha prácticamente desde dentro de la orquesta (no era el mejor sitio para grabar la voz, la verdad)
Era una versión con las partes dialogadas en español. Ya que estoy, expondré algunos pensamientos que me suscitó esta ópera, aunque soy consciente de que no debemos juzgar la mentalidad de los personajes según nuestro esquema de valores actual, porque salen todos bastante perjudicados. Y esto es así tanto para los personajes de una ópera como a la hora de juzgar personajes históricos de épocas anteriores.
A partir de aquí, AVISO DE SPOILER, si no sabes de qué va y quieres verla... NO SIGAS LEYENDO por la cuenta que te trae. Luego no quiero quejas.
Es curioso que Sarastro, el bueno buenísimo, que al principio se nos presenta como un malvado que le ha robado la hija a la reina Astriflamante, tiene un pensamiento bastante machista, o no sé si decir "paternalista" hacia las mujeres ("las mujeres necesitan un hombre que las guíe", "las mujeres hablan y hablan y no hacen nada"... frases por el estilo). Desde luego si lo juzgamos así, la Reina de la Noche nos parecerá más bien una mujer que lucha por ser en sí misma algo más que la callada y virtuosa compañera de un varón, que es a lo que parece que la quiere relegar Sarastro, y ella no se deja, la muy soberbia.
Luego tenemos también el contraste entre el aristocrático Tamino y el vulgar Papageno, representante de las "clases bajas" (por llamarlo de alguna manera). Tras pasar con éxito las pruebas junto a Pamina, Tamino será aceptado entre los elegidos del templo, pero Papageno no será aceptado, ni falta que le hará ya que conseguirá la felicidad mediante otros medios más prosaicos. En cierto modo el mensaje que yo veo, es que hay gente superior que aspira a algo más, a la sabiduría, y otros que por el contrario, se conforman para ser felices con lo básico y no tienen otra aspiración. Ambos tienen derecho a existir, pero claro... unos son mejores que otros.
Todas estas cosas me chirriaban un poco, y me hacen pensar que, al contrario de como se la suele entender, ésta NO es una ópera apta para niños. Y es que tampoco tiene porqué serlo, de hecho creo que verla como música para niños sólo consigue desvirtuarla. Más bien pienso que es una ópera para "gente mayor", que esté capacitada para coger con pinzas lo que aquí se dice y sobre todo comprenderlo dentro de su contexto. Además no entiendo esa manía de introducirle a los niños Die zauberflöte con calzador, sólo porque el argumento tiene tintes fantásticos y la música es agradable y pegadiza. Yo mismo, cuando era pequeño, vi una adaptación de ella en el conservatorio y se me hizo larguísima, y eso que creo que era con marionetas. Pero es normal, porque aún hay momentos que me parecen un plomazo.
Para concluir, y contextualizar esta ópera, me parece interesante añadir lo que nos cuenta acerca de ella Charles Rosen, en su libro El estilo clásico:
La "fábula" de Gozziera un arma de doble filo: dependiendo como dependía de la más rancia farsa popular y de las historias de encantamiento mágico para la plasmación de las ideas políticas y filosóficas, Gozzi esperaba combatir la nefasta influencia del Siglo de las Luces francés, y reforzar el prestigio crepuscular de la aristocracia. En manos de Mozart y Schikaneder, se convirtió en el estandarte del liberalismo de la clase media, en un ataque soterrado contra el gobierno, y en una espléndida obra de propaganda de la francmasonería. No obstante, el sesgo aristocrático de Gozzi subsiste implícito en la forma, en el contraste entre el principesco e idealista Tamino y el materialista Papageno, personaje que debe su complejidad únicamente a la antigua tradición de la farsa que le da vida, y a la que implícitamente recuerda. En el sentido más profundo, la obra de Gozzi era un ataque al racionalismo contemporáneo, y sus formas mezcladas dejaban abierta la espita a la imaginación.
Aunque con un día de retraso, aquí está mi entrada del Día de Andalucía. En ella podéis escuchar la actuación del Ensemble de clarinetes de la Sociedad Filarmónica de Pilas que tuvo lugar en el acto institucional que se celebra en la Casa de la Cultura la mañana del 28 de febrero.
La primera de las piezas que tocamos, relacionada con Andalucía de refilón es la Habanera de la ópera Carmen, de Georges Bizet (que muy andaluz no era, pero Carmen si que era sevillana) Es una arreglo mío de parte de una fantasía sobre Carmen para clarinete y piano (que creo que a su vez está sacado de la famosa pieza de Pablo Sarasate para violín). El solista es Joaquín Jesús Calderón: https://twitter.com/SFdePilas/status/571805855370227712?s=04
La siguiente pieza es la Danza ritual del fuego, de El amor brujo, de Manuel de Falla, también en arreglo mío, para octeto de clarinetes (requinto, 5 clarinetes en Sib y 2 clarinetes bajos), aunque aquí como podréis ver somos más de 8. He disfrutado como un enano tocando esto: https://twitter.com/SFdePilas/status/571805238664937472?s=04
Finalizamos nuestra participación con el Himno de Andalucía en versión de Ernesto Naranjo Hernandez, que estoy a la espera de poder subir por aquí también.
Y por fin llegamos a la última entrada ¿ahora me dan un premio por llevar a cabo el reto bien? ¿Dónde se recoge?
Hoy le toca a Giacomo Puccini, en particular a 2 de sus óperas. Ambas las conozco gracias a Auri (sí, la de Aurilibri y Nulla dies sine Aurea, la misma) Ella fue la que estando en el instituto me las dio a conocer. Nunca acabaré de agradecérselo. Desde entonces, Puccini es otro uno de mis compositores preferidos.
La primera de esas óperas es Turandot. Cuando la conocí, concretamente en 1999, se representó esta ópera en el Liceo (http://www.liceubarcelona.cat/es/servicios/alquiler-de-producciones/turandot.html), y la retransmitieron por Radio Clásica. Yo me la grabé en una cinta y a partir de ahí no he dejado de escucharla, verla en vídeo (mejor no explico porqué no fui a verla cuando se representó en el Maestranza...) y me hice con la partitura, que es la de la foto, para ojear la instrumentación y chapurrearla al piano, a ver si se me pega algo.
Algún día quizás me extienda un poco más acerca de esta ópera, pero hoy sólo pondré una de las partes que más me gustan, no sólo de esta ópera sino de todas las de Puccini, el aria de Liù del acto tercero, comienza aproximadamente en el 3'40" del siguiente vídeo, "Tanto amore, segreto, e inconfessato...":
La ópera completa está llena de momentos realmente conseguidos, pero es que este... es un prodigio de melodía, armonía, una exquisitez de instrumentación, una belleza... un buen gusto que faltan palabras para definirlo.
La 2ª ópera es La Bohème, que para nosotros es casi una tradición quedar y verla en Navidad (¿Y por qué en Navidad? pues no sé, cualquier momento sería bueno para ponerse La Bohème, realmente) Esta sí tuve ocasión de ir a verla al Maestranza hace algunos años.
De esta he seleccionado un aria que he acompañado al piano en alguna ocasión, y que es otra maravilla, "Si, mi chiamano Mimi", en la cual Mimi le dice a Rodolfo quién es y a qué se dedica:
Y nada más, con esto se acaban estas 7 entradas especiales dedicadas a esas músicas que o bien escuchaba de pequeño o, como en este último caso, me han llegado a la patata. Espero que la selección os haya gustado.
Ahora le toca el turno a los Cuadros de una exposición, de Modest Musorgsky, que también es una obra que me ha encantado desde siempre.
En este caso la cinta, que era de no recuerdo qué orquesta dirigida por Sir Malcolm Sargent (era la orquestación de Ravel) lleva varios años metida en el radiocassette de mi coche, sin poder salir. Pero ahí no molesta, así que ahí se quedará por ahora. La compré en 1996 en Valencia, en un viaje que hicimos con la banda a Antella. Era mi primer año en la banda.
Como con toda la música que me gusta mucho, me hice con la partitura (la de piano, aunque por aquí tengo también la orquestación de Ravel), para chapurrearla o hacer arreglos. El caso era tocar esta música fuera como fuera.
Copio un poco del prefacio de la partitura de piano para informarnos un poco de las circunstancias de la creación de esta obra:
En poco tiempo, entre el 2 y el 22 de junio de 1874, escribió Modesto Petrovich Musorgsky el ciclo pianístico Cuadros de una exposición (Kartinki s wystanwki). Su amigo Viktor Alexandrovich Hartmann (1834- 1873) había fallecido repentinamente, y se había organizado, gracias al crítico de arte Vladimir Vasilievich Stasov, una exposición con trabajos de Hartmann (dibujos, acuarelas, proyectos, etc.); Musorgsky decidió entonces honrar el recuerdo de su amigo dedicándole un ciclo o colección de piezas pianísticas que habían de referirse a algunas de las obras expuestas. Originariamente este ciclo se tituló simplemente Hartmann. (...) Para su ciclo, Musorgsky eligió preferentemente dibujos y acuarelas que Hartmann había traído de sus viajes al extranjero, de Italia, Francia y otros países. Pero hoy puede verificarse sólo en parte qué modelos inspiraron a Musorgsky, ya que no todos los cuadros y dibujos se han conservado. En los trabajos que se conocen de Hartmann, que era propiamente arquitecto, se refleja bien su ambición profesional de crear un estilo arquitectónico propiamente nacional. Engloba para ello en sus proyectos rasgos populares, elementos de la escultura en madera y de los tipos de ornamentación rusos tradicionales. La gran Puerta de Kiev, no obstante, no se construyó, quedando sólo la propuesta. (...)
He señalado parte del párrafo en negrita porque este objetivo de crear un estilo arquitectónico propiamente ruso me parece muy similar a las intenciones musicales del Grupo de los Cinco, en el cual se cuenta a Musorgsky.
El ciclo, aunque no completo, fue orquestado por M. Tuschmalov; la obra completa más tarde, en 1922, por Mauricio Ravel, como encargo de Serge Kusevitzky. Otra orquestación, muy conocida, es la que realizó el director de orquesta Leopoldo Stokowsky. (...)
El programa del ciclo, tal y como aparece en la primera de las ediciones citadas de Stasov, es el siguiente:
"La introducción va designada como Promenade.
Nº 1. El gnomo. El dibujo muestra un pequeño gnomo que camina torpemente con sus piernas torcidas.
Nº2. Il vecchio castello. Un castillo medieval ante el que un trovador canta una canción.
Nº 3. Tuileries. Dispute d'enfants après jeux. Un paseo del jardín de las Tullerías con muchos niños y niñeras.
Nº4. Bydlo. Una carreta polaca de enormes ruedas, tirada por bueyes.
Nº5. Baile de polluelos en sus cascarones. Boceto de Hartmann para la representación de una escena del ballet Trilby.
Nº6. Dos judios polacos, el uno rico y el otro pobre.
Nº7. Limoges, Le marché. Mujeres francesas peleando encarnizadamente en el mercado.
Nº 8. Catacombe. En este cuadro se había representado el propio Hartmann examinando las catacumbas parisinas a la luz de una linterna.
Nº 9. La cabaña sobre patas de gallina. El dibujo de Hartmann muestra un reloj en forma de cabaña de bruja sobre patas de gallina. Musorgsky añadió la cabalgada de Baba- Yaga (la bruja) montada en su mortero.
Nº10. La puerta de los Bogatyr en Kiev. El dibujo de Hartmann es el proyecto para una puerta de la ciudad de Kiev en el antiguo y macizo estilo ruso, con una cúpula en forma de casco eslavo.
Y aquí la música, en la versión orquestal de Maurice Ravel:
Como la obra es relativamente poco conocida en su versión original no me iré sin antes dejarla también aquí:
(Aviso, Horowitz la adorna un poco, no toca exactamente lo que pone en la partitura)